Innovando con el nuevo proyector Apolo y el punto de luz Tomsk
La gama Light de Benito ha mejorado los proyectores Apolo que ahora son más ligeros, más eficientes y más fáciles de montar y ha simplificado el acoplamiento de la Tomsk
Cualquier momento es bueno para mejorar la eficiencia energética de la iluminación de las instalaciones deportivas. Pero cuando se acaban las competiciones es el momento perfecto. Además, hay abierta una convocatoria del MITECO (Ministerio para la Transición Ecológica y el Reto Demográfico) para proyectos singulares de alumbrado que incluyan la eficiencia energética. Una eficiencia que se consigue, en un primer momento, con el cambio a LED. Benito ya lleva instalados diversos proyectos de iluminación que han mejorado la eficiencia energética y económica de las instalaciones deportivas. Pero ha dado un paso más mejorando su proyector Apolo que cuenta con tres grandes ventajas: pesa menos, es más eficiente y cuenta con una mayor facilidad de montaje.
En relación con el peso, esta variable es importante porque se rebajan en un 40% los 40 kg de los anteriores modelos. Bajando el peso se mejora la instalación en las columnas que, habitualmente, llevan 6 focos y permite que no necesiten refuerzos. Al mismo tiempo se ha mejorado la eficiencia con dos tecnologías nuevas. Por un lado, se han puesto unas ópticas distintas especiales para minimizar el deslumbramiento, y se utiliza una nueva generación de LED que ofrece una mejora en rendimiento lumínico superando los 150lm/W con un diseño de menor dimensión y con todas las funcionalidades de orientación y control.
La otra mejora está en el campo de los drivers de control, pasando de usar 4 drivers (Proyector Apolo L 1000W) en una caja de control a un solo driver más potente, de 1.000 a 1.500 W que se puede montar en el mismo proyector o en un armario instalado en la base del mástil. Con esta modificación se reduce el peso global en más de 5 kg y usando un solo cable para pasar hacia cada proyecto en vez de cuatro. En total, con un proyector de 1.000 W y los drivers se ha pasado de 34,5 kg a 20 kg.
El campo Pepe Quimarán, en el municipio de Llarena, en Asturias, es la sede de la Unión Deportiva Llarena. El campo se construyó en 1929, tiene actualmente césped artificial y capacidad para 1.000 espectadores. Se han cambiado 32 focos por 24 proyectores con sistema ONfield lo que le permite pasar a ser un campo de clase III.
Mantienen lógicamente el sistema de control ONfield Sport para poder controlar el encendido y apagado, y las distintas escenas que tiene que iluminar: si es un entrenamiento, un partido de fútbol 11 o fútbol 7 con el uso de medio campo. Todo el sistema se comunica por tecnología Bluetooth 5.0, sin cables y por lo tanto no necesita obra civil ni cableado adicional. Des de la aplicación o un teclado de control se puede automatizar el encendido en cada momento, consiguiendo que funcione perfectamente en distancias de más de 100 metros entre luminarias. Hasta ahora, el 78% de los campos que se han proyectado des de BENITO son con sistema de control maximizando el ahorro energético y minimizando el impacto de la luz artificial mitigando así los efectos de la contaminación lumínica y la luz intrusa.
Inversión que retorna en 3 y 4 años
Los distintos proyectos estandarizados tanto para campos de futbol como para instalaciones interiores o pistas de tenis y pádel suponen un retorno de la inversión de entre 3 y 4 años. Aunque se hace, para cada caso, un estudio lumínico, desde BENITO se plantean 6 soluciones tipo para campos de futbol. Tres con 4 mástiles a 18 metros y los proyectores adecuados en función de la medida del campo y otras tres con 6 mástiles a 18 metros que también incluyen las distintas medidas de proyector según el tipo de campo. En los dos casos también se proyecta en función de los requerimientos lumínicos. El coste se sitúa entre 75.000 y 20.000 € y el ahorro estimado va des de 23.650 a 7.366 € al año. Solo en el caso de los campos amateurs, la propuesta se hace sin el control ONfield. El ahorro energético se estima entre 60 y 70%, lo que significa que puede llegar a un ahorro de hasta 81.560 kWh/año en la propuesta más completa.
LA NUEVA TOMSK ADAPTABLE A TODO TIPO DE COLUMNAS
El punto de luz Tomsk da un paso más en adaptabilidad con la innovación diseñada por el departamento de Light. Se trata de incorporar una nueva pieza que permite adaptar el punto de luz tanto a las columnas cuadradas, como hasta ahora, pero también a las cilíndricas. La luminaria es la misma, pero se ha conseguido añadir una pieza que permite este cambio y montarla en distintas posiciones sin dificultad añadida.
Como explican desde el departamento, se trata de la misma luminaria de máxima finura arquitectónica, con la opción de 24 o 32 LEDs, que mantiene una escuadra perfecta en el diseño, pero con la nueva pieza donde queda disimulada toda la parte electrónica, permite ser instalada en una columna cilíndrica.
